Ingredientes

• 2 tazas de agua
• 1/2 cucharita de sal
• 1 cuchara de aceite de oliva virgen extra
• 2 tazas de harina de arroz blanco

Pasos

1. Comienza agregando dos tazas de agua en una sartén o olla.
2. Añade también media cucharita de sal y una cuchara de aceite de oliva virgen extra.
3. Mide dos tazas de harina de arroz. Te recomiendo agregar la harina a la taza con una cuchara. Una vez este casi al tope, utiliza una superficie plana como un cuchillo, para aplanar la superficie.
4. Lleva la sartén al fogón y prende a fuego medio alto hasta llevar a punto de ebullición.
5. Una vez esté hirviendo reduce el fuego y agrega de golpe toda la harina arroz.
6. Revuelve hasta que la harina absorba toda el agua, va a resultar en una textura grumosa. Pero no te preocupes, eso hace parte del proceso.
7. Ahora tapa la sartén y deja cocinar por 2 minutos.
8. Una vez pasados los dos minutos, pasa inmediatamente toda la mezcla a un bowl amplio.
9. Mientras esté caliente mezcla la masa. Hazlo con una espátula para que evites quemaduras. Trata de disolver todos los grumos.
10. Cuando la superficie de la masa se vea lisa, pásala a una superficie en la que puedas amasar. Generalmente recomiendo hacerlo en un tapete de silicona porque es mas fácil de limpiar.
11. Forma un cilindro con esta masa, especialmente al comienzo puede ser un poco pegajosa pero debería ser fácil de trabajar.
12. Una vez tengas un cilindro lo más parejo posible, corta con un cuchillo a la mitad. Te recomiendo humedecerlo para que no se pegue tanto.
13. Dependiendo del tamaño que quieras las tortillas o rotis, puedes dividir cada mitad en 3 o 6.
14. Cuando termines de dividir la masa, forma bolas con cada trocito y cúbrelas con un paño húmedo para evitar que se resequen en la superficie.
15. Ahora utiliza harina de arroz para enharinar la superficie, también enharina el rodillo con que vas a estirar la masa.
16. Toma uno de los trocitos y cúbrelo ligeramente con la harina.
17. Puedes darle golpecitos con el rodillo para hacer la masa más plana y que sea mas fácil estirar.
18. Al estirar te recomiendo ir cambiando de dirección para que la masa no se pegue a la superficie y para poderle dar una forma redonda. Si la masa se te pega al rodillo, trata de eliminar los pegotes que pueda tener el rodillo utilizando harina de arroz
19. Cuando tengas una superficie pareja puedes llevarla a cocer con la forma que quede o puedes cortarla en forma circular utilizando un molde o un plato como guía.
20. Y no botes los excesos de masa, porque los puedes amasar al final para hacer mas tortillas.
21. Al acabar de estirar y dar forma a cada tortilla, recuerda cubrirla con el mismo paño que utilizaste al partir la masa.
22. Recuerda que cuando vayas a poner un nuevo pedacito de masa debes enharina ligeramente la superficie.
23. Repite el proceso hasta acabar con toda la masa.
24. Para cocinar precalienta una plancha y agrega un poquito de aceite a elección.
25. Una vez caliente lleva el roti a cocinar, la clave aquí es voltearlo tan pronto como sea posible para que la superficie no se reseque.
26. Voltéalo nuevamente y deberá comenzarse a inflar.
27. Saca de fuego y si quedó harina en la plancha trata de limpiarla con unas pinzas y un papel de cocina, para que no se vayan a pegar las próximas tortillas.
28. Sigue cocinando hasta que termines y evita dorarlas porque pierden flexibilidad.
29. Consúmelas al instante o guardarlas en un tapper que sea hermético. Una vez cocidas duran aproximadamente 2 días, si quieres guardarlas por mas tiempo te recomiendo estirarlas y congelarlas, cuando quieras consumirlas solo deberas cocerlas y como son tan delgadas estarán listas en poco tiempo.